AGUAS DEL YAQUE BAJAN DE NIVEL MIENTRAS MILLARES RETORNAN A SUS HOGARES

El tránsito por la carretera que comunica a Montecristi con Dajabón, quedó interrumpido por las inundaciones
10.00 A. M./MONTECRISTI.-Las aguas que mantienen la riada del Yaque del Norte, luego de causar con sus inundaciones severos estragos en diversas comunidades ubicadas en ambas márgenes en su trayecto desde Santiago hasta su desembocadura en el Océano Atlántico en las costas de esta provincia, iniciaron en las primeras horas de la tarde de ayer (domingo) su descenso, por lo que alrededor de 25 mil refugios comenzaron a retornar a sus hogares.
La crecida mantuvo totalmente inundado e incomunicado a Guayubín, Castañuelas, Jobo Corcovado, Palo Verde, Los Solares; así como a los bateyes: Higüero, Isabel, Juliana, Jaramillo, Magdalena y La Cruz, entre otras localidades, causando pérdidas millonarias que aún no han sido cuantificadas por las autoridades. Aún permanecen algunas comunidades inundadas y el transito por la carretera que comunica a Montecristi con Dajabón, comenzó a rehabilitarse desde la mañana de este lunes permitiéndose el paso solo a vehículos altos, sin niños y envejecientes como pasajeros.
Santiago Rafael Caba Abreu, gobernador provincial y director del COE, informó que se tiene conformado un equipo de técnicos que laboran en el levantamiento diagnóstico para cuantificar los daños y rendirle un informe al presidente Leonel Fernández.
Las autoridades señalaron que gracias a que a tiempo se tomaron las medidas de previsión, no se han reportado víctimas humanas.
José (Pepe) Faña, vicepresidente de la Asociación Nacional de Bananeros (ASOBANANO), pidió al gobierno acudir en auxilio del sector agropecuario de la zona afectada, que ha soportado seis inundaciones en lo que va del presente año.
El senador Heinz Vieluf Cabrera informó que en coordinación con Salud Pública inició ayer un programa de fumigación en las comunidades afectadas, para prevenir brotes de enfermedades.

SIETE DÍAS SIN AGUA POTABLE
La riada del Yaque del Norte provocó la rotura de tuberías del sistema del acueducto del Noroeste, lo que mantiene por siete días sin el suministro de agua potable a todas las comunidades de la Línea Noroeste, generándose una situación agobiante, pues los camiones cisterna son insuficientes frente a la gran demanda de los residentes, sumado a la atención que se está brindando a los refugiados.
En ese sentido Caba Abreu informó que ha solicitado a la dirección nacional del INAPA, el INDHI, así como la presidencia de la República, el envío de camiones cisterna para conjurar la crisis.