Alberto José Peña
Montecristi.-En un concurrido acto donde asistieron las autoridades civiles, militares, eclesiásticas e invitados internacionales, se puso fin al reinado de ocho años del Ing. José Ignacio Martínez Datt (Nachito), dando paso al nuevo alcalde el Licenciado Luis Méndez, (El Caballito) del Partido Revolucionario Dominicano PRD.
Con el posicionamiento de los nuevos regidores, de los cuales solo uno repite, llego el juramento de las nuevas autoridades por parte del representante de
El señor alcalde se hizo acompañar de la vice_alcaldeza, Clara Altagracia Mena, los ediles Francisco Gómez, Zeneyda Sigollén, Rudy García, Luis Gabot, Vianela Peña, Raúl Tull y el ex sindico Ing. Camilo Suero Grullón.
Agradeciendo la presencia de los invitados especiales, nacionales e internacionales encabezado por el Alcalde del municipio de Guaynabo Puerto Rico, señor Héctor Oneill García y su señora
Alba de Oneill, inició su discurso el nuevo alcalde.
Dijo “ser un día doblemente especial para su vida, en primer lugar por sentirse orgulloso de ser dominicano y tener el privilegio de celebrar un año mas de la gesta que restauró nuestra Independencia Nacional, la cual fue mancillada por el general Pedro Santana con la oprobiosa Anexión a España en el año 1861, cercenadora de los derechos individuales de los ciudadanos.
Recordó los Montecristeños y Linieros que participaron en la gesta restauradora, haciendo mención de : Juan De
Expreso ser muy especial desde el mismo momento en que se le comunico el triunfo de su candidatura, comenzó a contemplar más de cerca y con mayor detenimiento las enormes responsabilidades que implica la administración de un ayuntamiento, ante la imponente pirámide de esas obligaciones.
El Alcalde Méndez, manifestó, que si algo hay que rebose su espíritu de intensa satisfacción en ese inolvidable y emotivo momento de su vida, era su convicción de que la mejor credencial que podía invocar en el desempeño de las elevadas funciones para la que fue electo, consiste en su absoluta seguridad de que al aceptar tan honradota designación, había contraído una deuda con el pueblo de Montecristi, de cuya magnitud son igualmente solidarios los amigos que así se lo habían pedido.
Preciso, que las puertas del ayuntamiento del municipio de Montecristi, siempre estarán abiertas a todos los ciudadanos de buena voluntad que de algún modo quieran aportar sus ideas para que Montecristi se desplace por el camino del Progreso y del Desarrollo.
Puntualizó que no pretende realizar obras gigantescas, de lujos, que no rindan ninguna utilidad al pueblo. Sino realizar obras pequeñas, significativas, dignificantes pero prioritarias de utilidad para todos.
Finalmente pidió tener confianza en el y en