Félix
González
El 5
de abril de cada año está consignado en la República Dominicana como Día
Nacional del Periodista en memoria a la primera edición del periódico “El telégrafo Constitucional”, impreso en
Santo Domingo, cuya primera tirada
circuló del 5 de abril de 1821. Este primer periódico dominicano era dirigido
por el doctor Antonio María Pineda, profesor de la que otrora se denominaba
Universidad de Santo Domingo, hoy Universidad Autónoma de Santo Domingo.
El
Consejo de Estado, que presidía el doctor Rafael F. Bonnelly, promulgó el 30 de
enero del año 1962 la Ley 5807, mediante la cual se estableció la celebración
del Día del Periodista el 5 de abril, desde entonces cada año se celebra el Día
Nacional del Periodista.
A
propósito del Día Nacional del Periodista, es muy saludable recordar el interés
que debemos mostrar como profesionales de
la comunicación, en la preservación del sistema democrático, conservar las
libertades públicas, defender la libertad de expresión, en promover la garantía
que ha de ofrecer el Estado al cumplimiento de los derechos humanos y las demás
prerrogativas inherentes a los dominicanos.
A los
hombres y mujeres que con su pluma y su pensamiento creativo destacan los
hechos, fundamentados en la verdad y el respeto para mantener debidamente informada
a la sociedad; defendiendo con honor y decoro los valores que engrandecen la
Patria y a sus mejores hijos, aunque con creces paguemos nuestro arrojo como
pulcros e incorruptibles profesionales de la información ecuánime; a ell@s LES
RETO A QUE CONTINUEMOS ASUMIENDO EL SAGRADO COMPROMISO DE NO DESMAYAR, MANTENER
Y ENARBOLAR LOS PRINCIPIOS ETICOS EN LA CONSTRUCCIÓN DE UNA SOCIEDAD PULCRA, DIGNA
DE LOS MEJORES ELOGIOS, SIN INJUSTICIAS, SIN CORRUPCIÓN, SIN EXCLUSIÓN. QUE NO
DEJEMOS, NO COLABOREMOS CON LA INVOLUCIÓN, NO PERMITAMOS QUE SE SIGA
ANESTECIANDO AL PUEBLO DOMINICANO Y SE LE SIGA EMBADURNANDO LAS MENTES DE
MIASMAS PARA QUE MUESTRE UNA PASIVA ACTITUD QUE FACILITE PERMITIR QUE CONSINTAMOS
QUE SE SIGA DESARROLLANDO EL MODELO SOCIOPOLÍTICO DE LA IMPUNIDAD Y DEL SAQUEO
DE LOS PATRIMONIOS DE LA PATRIA DOMINICANA.
